El viernes 14 de Octubre, se nos planteó una actividad práctica en la cual interveníamos todos y cada uno de los miembros de clase, pero en diferentes grupos. Un grupo, "el de los vaguetes" eran los observadores, cuya finalidad era la de cada 30 segundos anotar una serie de conceptos, en base a si se cumplían o no, por parte del otro grupo "el de los profes", los cuales se dedicaban a transmitir diferentes conceptos y conocimientos sobre el toque de mano baja de voleibol, cuya finalidad era la de ponerse en el papel de profesor, no la de intentar que el otro grupo "los currantes" sepan con total precisión poner en práctica en toque de mano baja en voleibol.
Esta práctica me sirvió para darme cuenta de que es muy importante estar en esos tres roles, y que de unos a otros nos enseñamos y educamos, porque el profesor transmite unos determinados conocimientos, los cuales, él cree que son los más adecuados en ese momento para que aprendan dicho gesto. Los observadores basándose en unos determinados aspectos evalúan de manera positiva o negativamente a los profesores, los cuales, bajo mi punto de vista, deberían de haber visto esas anotaciones para poder reflexionar sobre ello. Y los alumnos, los cuales servirán al profesor para determinar su manera de que transcurra la clase, y de visualizar los errores de cada uno de ellos, los cuales deberían de haber sido predecidos, pero sin ningún tipo de planificación de la clase y casi sin experiencia...esa tarea resulta muy difícil.
Aquí os dejo una pregunta, con la que espero captar la máxima cantidad posible de comentarios. ¿Opináis igual que yo en el aspecto de que se hubieran tenido que poner en común las anotaciones de los observadores y por ejemplo, las impresiones de los alumnos? ¿Por qué?
PD: si alguno se ha sentido ofendido por mi "caracterización" de cada uno de los grupos, no es mi intención, ni mucho más lejos que de la de darle un toque de humor.
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